
- 3 huevos
- 250 g azúcar
- 60 g mantequilla
- 170 g harina de repostería
- 1 cucharadita y media de levadura en polvo
- 40 g nata para montar
- 50 g zumo de limón
Para la glasa:
- 1 cucharada de zumo de limón
- 1 taza de azúcar glas
Para el almíbar:
- 75 g de azúcar
- 75 g de agua
- zumo de un limón
Me encanta los postres con limón, tenía muchísimas ganas de probar esta receta , sabía que me iba a encantar y así ha sido.
Precalentamos el horno a 175º.
Engrasamos unos moldes o flaneras.
Tamizamos la harina con la levadura en polvo y reservamos.
Todos los ingredientes deben estar a temperatura ambiente, están mejor de un día para otro, los hice por la tarde, cuando estaban fríos los emborraché con el almíbar y los deje bien tapados toda la noche, al día siguiente están espectaculares.
Batimos la mantequilla con el azúcar y la ralladura de limón, con las varillas eléctricas hasta que sea una crema blanquecina, añadimos los huevos de uno en uno, hasta integrar,
Añadimos la nata y el zumo de limón.
Incorporamos la harina, a baja velocidad y lo justo hasta integrar.
Vertemos la masa en los moldes engrasados e introducimos en el horno precalentado, unos 20-25 minutos, el tiempo es orientativo depende de cada horno, pinchamos con un palillo para comprobar que están hechos antes de sacarlos del horno,
Una vez fríos desmoldamos, pinchamos repetidas veces con un palillo y los calamos con el almíbar de limón.
Tapamos bien con filme y dejamos reposar toda la noche.
El glaseado es opcional, si queremos glasearlo preparamos una glasa con el limón y el azúcar glas, mezclamos y cubrimos la superficie del bizcocho.