
Abrir la vaina de vainilla por la mitad y extrae las semillas con cuidado. Reservamos.
En un cazo ponemos la leche, la nata, la vaina de vainilla y las semillas. Calentamos, pero sin llegar a hervir.
En un bol batimos el azúcar y las yemas de huevo hasta que estén integradas, y se haga una crema. Yo lo he batido con unas varillas a velocidad baja. Reservamos.
Retiramos la vaina de vainilla de la leche y la vamos echando con cuidado y sin dejar de mover a la mezcla de azucar y yemas. Cuando esté integrado, volvemos a echar esta mezcla en el cazo y calentamos sin dejar de remover hasta conseguir que la crema que espese un poco y empiecen a aparecer pequeñas burbujas pero sin que llegue a hervir, porque se podría cortar la crema. Incorporamos a la mezcla los 300 ml de nata y la pizca de sal. Mezclamos bien para que quede bien integrado.
Tapamos con un film transparente y dejamos enfriar bien en la nevera. Pasadas unas horas y una vez que la crema está completamente fría, echamos la crema en la heladera y la ponemos a funcionar según las instrucciones de la máquina. A mí me ha tardado unos 2o minutos aproximadamente.
Cuando veamos que esta mantecado, ponemos el helado en un recipiente hermético o tapado con film y congelamos hasta el momento de servir. Para servirlo, sacarlo 5 minutos antes del congelador.
Si no tienes heladera, pasa la crema a un recipiente y congela. Cada hora saca y ve batiendo enérgicamente para eliminar los cristales que se van formando. Repetimos la operación 3-4 veces hasta comprobar que tiene una textura de helado cremoso.
Thank you Sarah for this work.Devendra singh