
- 250 g de frambuesas
- 60 g de azúcar
- 100 ml. de leche entera.
- 300 ml de nata
- 3 hojas de gelatina neutra
- zumo de medio limón
La pannacotta es un postre fácil de preparar, suave con textura que recuerda a él flan y fresquito ideal con estos calores.
Siempre que he hecho pannacotta la he hecho de vainilla , acompañándola de frutas naturales o mermelada, en esta ocasión la hice de frambuesas, pero se puede hacer con cualquier fruta, arándanos, cerezas, moras etc.
En primer lugar ponemos en un cazo a fuego medio, el zumo del medio limón, el azúcar y las frambuesas. Removemos constantemente y una vez alcance temperatura de ebullición, retiramos del fuego y trituramos la mezcla, pasamos la crema por un tamiz. Reservamos.
Hiidratamos las hojas de gelatina, para ello ponemos las hojas en un cuenco con agua fría durante unos 10 minutos. Pasado ese tiempo retiramos las hojas de gelatina y las escurrimos bien. Reservamos.
En un cazo calentamos la leche y la nata liquida, una vez alcance también la temperatura de ebullición, retiramos del fuego y vertemos la crema de frambuesas . Removemos hasta conseguir una crema homogénea y una vez conseguido, añadimos las hojas de gelatina hidratadas. Removemos hasta que se han disuelvan.
Repartimos la crema en los vasos de cristal y metemos en el frigorífico hasta observar se han solidificado perfectamente, aproximadamente 2-3 horas.